Solo disfruta.

martes, 25 de diciembre de 2012

Bo nadal


He de reconocer que la Navidad ha cambiado inevitablemente desde que mi hermano ha dejado de creer en papá Noel y en los reyes magos.

Recuerdo esas navidades como algo completamente distinto, algo especial.
Me encantaba saber la verdad, me encantaba guardar ese secreto como si fuera un verdadero tesoro, me hacía sentirme mayor e importante.
Era feliz mirando con él la revista de juguetes y ayudándole a hacer la carta para luego llevársela a mis padres y sentir que había hecho el mejor trabajo del mundo.
Era increíble el sentimiento de ir a comprar los regalos con mi padre y posteriormente ayudar a mi madre a esconderlos y empaquetarlos.
Adoraba los nervios que tenía el pequeñajo semanas antes de Navidad, el… ¿San, me porté bien este año, verdad? ¿No me van a traer carbón, verdad?, la sonrisita que se me escapaba y mi posterior respuesta: ¿Tu qué crees?, ¿te has portado bien? Y por supuesto, dejarle con aquella incertidumbre…
Recuerdo la noche anterior a abrir los regalos, lo temprano que se iba a la cama y la ilusión que había en sus pequeños ojos.
Y sin duda, la mejor de las sensaciones para mi, eran los gritos que pegaba a las 8 de la mañana para despertarme porque tenía miedo de ir él solito al salón a ver los regalos.  Momentos después me los pasaba abriendo juguetes, leyendo instrucciones y jugando con un sueño tremendo, pero feliz, increíblemente feliz.

Me da pena que todo esto hayan sido solo unos años, que solo sean especiales las navidades cuando hay un niño en casa. La navidad es para todos, debería provocar alegría y no odio. Y sinceramente, para pocas cosas que nos unen, deberíamos valorarlas más.

Y finalmente: 
Creo que los regalos no hacen la navidad. Creo que la navidad es amor, y el amor es el que hace los regalos. 








Feliz navidad a todos. Estas fotos, son con mi familia en Burgos, me parece que quedaron bastante graciosas :)

Sandra


jueves, 20 de diciembre de 2012

Cerrar los ojos para ver.


¿Nunca habéis tenido esa sensación de estar viviendo vuestra vida desde fuera, como si no os estuviera pasando a vosotros?
Las personas, tenemos una forma “automática” de mirar. De mirar a los demás, de mirar a lo que nos rodea, de mirar sin ver. Acostumbrados a esto, no hacemos más que vernos como una pieza más de este puzzle complejo que es el mundo.

De la misma manera que utilizamos instrumentos tales como el telescopio para ver las estrellas. O el microscopio para ver cosas minúsculas. También necesitamos ese “artefacto” para mirarnos a nosotros mismos, a través de nuestra propia retina, y esa es la mirada interna. La mirada que cada uno se dirige.

La forma que cada uno tiene de ver las cosas, no es algo que “venga de fábrica” sino que se forja a medida que pasa la vida. Los recuerdos, los sentimientos, los sueños e incluso el futuro, de una forma meramente hipotética, influyen en ello.

He encontrado una frase interesante de Henry Ward Beecher : "Usted y yo no vemos las cosas como son. Vemos las cosas como somos."

No es fácil tener una mirada limpia. No siempre es fácil encontrar en la mirada interna visiones optimistas, puesto que solemos mirarnos y juzgarnos a nosotros mismos más duramente que a los demás, pero como bien dijo Paulo Coelho: "Podemos tener todos los medios de comunicación del mundo, pero nada, absolutamente nada, sustituye la mirada del ser humano






Sandra 


domingo, 16 de diciembre de 2012

Adiós cordura.


Hoy en día, a la gente que es más feliz de lo normal, se le tacha de loca, cosa que me parece incoherente.
En cierto modo soy consciente de que vende más la pena que la felicidad en el mundo en el que vivimos, pero ¿No es mejor vivir sonriendo?

Siempre me ha llamado la atención una frase de Dalí referente a la locura, que dice así: “la diferencia entre un loco y yo, es que yo no estoy loco”
Repetidas veces se le ha tratado como un desequilibrado, pero, ¿y si no era así realmente?, ¿y si simplemente era feliz?

El ansia por alcanzar la felicidad y el amor plenos, son propósitos que nos unen a todos los seres humanos, de una u otra forma. Pero, ¿Quién regula eso? ¿Quien tiene el derecho de decir que una persona está loca y no simplemente que ha alcanzado la felicidad absoluta?
Por supuesto que existen especialistas dedicados a eso, pero todo es muy relativo, ya que la felicidad o el amor no son cosas palpables o medibles.

No todo es lo que parece, y la verdad, tampoco está mal estar un poco loco, ¿no?


En esta foto, os dejo parte de mi locura.

Sandra 



miércoles, 12 de diciembre de 2012

¿Creer o no creer?


Siempre me han encantado las marionetas, desde pequeñita. Me fascinaba esa capacidad de parecer tener vida propia, cuando en realidad era otra vida la que se reflectaba en ellas a través de unos simples hilos.
¿Sabéis? Esos hilos, me recuerdan al destino.
Ese destino ambiguo y efímero que parece regularlo todo a nuestro alrededor.
Ese destino que me produce un colapso en la cabeza, al no saberme responder a tantas dudas sobre él.
Me planteo que pasaría si conociera mi destino, si supiera con quién voy a estar casada, a que me voy a dedicar, si tendré hijos, si las personas importantes para mí seguirán a mi lado, si seré feliz¿Que pasaría? Y… ¿Qué pasaría si tuviera la capacidad de cambiar mi destino? ¿Volvería a pasar por las mismas situaciones?
Y aquí vienen los famosos: “No hay mal que por bien no venga”, “Las cosas pasan por algo”, “Todo acto tiene una consecuencia”. Personalmente no sé si todo esto es cierto, pero sé que de no haber cometido todos los errores que he cometido, de no haber perdido a las personas que he perdido o de no haber encontrado a las personas que he encontrado, yo no sería quien soy ahora mismo, y eso es algo que no quiero cambiar.

Existen demasiadas preguntas en mi cabeza con incógnitas sin despejar, yo os las planteo por si sois capaces de encontrar una solución.

¿Podemos evitar el destino? ¿Podemos cambiarlo con nuestros propios actos o “viene de fábrica” y no tenemos nada que hacer? ¿Influye el destino en las catástrofes, enfermedades, muertes y guerras o son cosas independientes? ¿Se puede creer en un dios y en el destino a la vez? ¿Por qué tenemos que confiar en lo que el destino tiene preparado para nosotros? 



                      Sandra


lunes, 10 de diciembre de 2012

Todo llega a su debido tiempo.


-Hola pequeña, hacía mucho tiempo que quería hablar contigo.
+¿Conmigo? ¿y por qué precisamente conmigo?
-No seas impaciente, todo llega en su debido momento.
+Bueno, está bien…Pero, ¿que querías decirme?
-Querida, creo que no estás siendo tu misma, que te estás dejando influenciar demasiado por las cosas que te dicen. Siempre has sido una persona alegre, ¿Qué pasa? ¿Por qué tanta tristeza? ¿Por qué tantas preguntas? .Regálate a ti misma el placer de sonreír, regálate el placer de la indiferencia hacia todo lo que no te hace bien. Piensa que la vida ya es demasiado complicada como para hacer de lo diario algo malo. Recuerda que la vida son dos días por muy tópico que suene y que lo que no hagas hoy, lo echarás de menos mañana. Por favor, date cuenta de que tu familia es lo más importante, que siempre estarán ahí, que nunca te dejarán sola.Aprende a mirar más allá, a leer entre líneas y no te dejes cegar por la belleza, porque no lo es todo. Disfruta de tus dones e intenta manejarlos a tu antojo. Celebra las pequeñeces, no esperes a los grandes acontecimientos. Ama de verdad, de corazón, a quién te haga sentir esas mariposas en tu estómago, pero no te dejes pisotear.  Y sobre todo, y más importante, protégete a ti misma.
+Yo… Yo no sé qué decir, no entiendo cómo has sabido ver a través de mi cabeza, de mis pensamientos.
-No quiero asustarte. Solo quiero lo mejor para ti, verte sonreír…
+Ahora tengo miedo de hablar, tengo miedo de decir algo que lo estropee, solo quiero saber una cosa.
-Soy todo oídos para ti.
+ ¿Quién eres?
-Bueno, digamos que formo parte de ti, solo que tu nunca habías querido escucharme. Algunos me llaman conciencia, pero tú puedes llamarme “Pepito grillo”



Bueno, como habéis podido ver, he dedicado una parte de mi blog a fotos y frases de disney. Alguien me aconsejó que podía darle a mi blog un enfoque más serio, es decir, sin tantos colores y demás e inconscientemente algo en mi se rebeló. No es que no quiera crecer, pero creo que no hay que olvidarse de nuestra parte infantil, de esa niña o ese niño que llevamos dentro. Espero que os haya gustado el cambio. Una vez más, gracias por leerme.

                                                                Sandra 

viernes, 7 de diciembre de 2012

Otoño.


Es tan bonito el otoño. Es tan bonita la multitud de colores de los que se visten las hojas de los árboles. Son tan bonitos los cambios de estaciones, y tan envidiables…
Envidiable esa facilidad de cambiar sin volver atrás hasta la fecha indicada. Igual que aquellos animales que hibernan, quizá nosotros necesitemos esa pausa en nuestras vidas. Ese tomarse un descanso para posteriormente volver con más fuerzas, ese dejarlo todo. Así como está, para darte cuenta si haces falta, si alguien te echa de menos.
Pero sin duda, mi mayor grado de envidia va dirigido a los pájaros, a sus alas, a su libertad. A ese momento en que deciden emigrar. Siempre se dice que emigran para buscar un clima más adecuado, pero, ¿y si simplemente quieren cambiar, alejarse de la rutina, de las cosas que les rodean habitualmente? ¿Y si solo están buscando a su media naranja? ¿ Y si solo quieren ver mundo? ¿Y si simplemente quieren sentir eso, libertad?
Me pregunto porque los seres humanos tenemos que buscarle explicación a todo, por que no simplemente lo dejamos pasar, lo dejamos estar, lo sentimos
¿Por qué tenemos que buscar algo en lo que creer?
¿Por qué necesitamos que alguien comparta nuestras opiniones?
¿Por qué no sabemos dejarnos llevar?
¿Por qué no paramos de darle vueltas a la cabeza?
¿Por qué...?



                      Sandra 

domingo, 2 de diciembre de 2012

Let's go


¿Por qué a veces la única solución para dejar de estar mal es llorar? ¿Por qué no podemos decirnos a nosotros mismos: PARA, CONTROLA, SONRIE y SIGUE?

Quiero emborracharme, pero quiero emborracharme de felicidad. Dejar de darle vueltas a todo y que todo de vueltas a mi alrededor.
Quiero ir por la calle recogiendo sonrisas, grabándolas en mi cabeza para no dejarlas ir.
Quiero mirar a los problemas y reírme en su puta cara, demostrándoles que no pueden conmigo.
Quiero ser capaz de pasar página, de olvidar y no echar de menos.
Quiero darme cuenta de que no me hace falta la valoración de nadie, que la única que importa es la mía.

Que si aún no existe la felicidad embotellada, tendremos que inventarla, no?




                                                          Sandra

miércoles, 28 de noviembre de 2012

La sociedad de hoy en día


Sé que es un tema peliagudo por que quizá diciendo lo que verdaderamente pienso algunas personas me salten al cuello, pero bueno, ya que es mi blog diré lo que me venga en gana.

Empiezo por el principio, los niños. Creo que los niños quieren crecer demasiado rápido, que quieren saltarse etapas y no creo que eso sea algo beneficioso para ellos, no creo que estar 6 horas al día pegado a una pantalla jugando a la “play” o al ordenador sea algo sano a esas edades. Bueno, en realidad, ni a esas ni a ningunas..
También digo que esto no es culpa de ellos, sino culpa de sus padres. De esos padres que por trabajar no están en casa, diciéndoles lo que tienes que hacer y lo que no. No les culpo, se supone que lo hacen para sacarlos adelante. Pero tener un hijo, no solo implica trabajar para ellos. También implica estar ahí para ver cómo crecen, ver como se caen y ayudarles a levantarse.

Sigo con los adolescentes.
Esa etapa en la que ni eres niño, para dejar que te guíen, ni eres adulto para guiarte solo.
Al igual que los niños, éstos también se están comiendo muchas etapas. Cada vez salen antes, cada vez tienen más libertad y menos restricciones  y cada vez se desmadran mas
Pequeños: ¡Ni fumar ni beber va a haceros mejores personas!
También me da vergüenza ver como poco a poco se ha perdido el respeto completamente POR TODO, por profesores, por personas mayores, por gente de su misma edad e incluso por sus padres. En este caso, no se si culparlos a ellos, a los padres, a las compañías que tienen o a la propia sociedad que les impulsa a ello.

Creo que en la sociedad en que vivimos se están fabricando “maquinas de trabajo” en vez de personas. Con esto me refiero a que cometer ahora mismo un error del tipo que sea, puede suponer la pérdida del trabajo. ¡Estamos hablando de errores señores! Estamos hablando de cosas que vienen de fábrica en los seres humanos, ¿o acaso conocéis a alguno perfecto? Porque si es así me gustaría que me lo presentarais.

Me hacen gracia las cosas como “san Valentín”, “el día del padre”, “el día de la madre”. Esos días creados solo y únicamente por consumismo. ¿Qué pasa, que solo puedes querer a tu pareja, a tu padre o a tu madre esos días? Entiendo que pueda ser un detalle bonito, ese día de reconocimiento a personas especiales e importantes en tu vida, pero no basta con darles un regalo un día, es mucho más.
Por no hablar de “papá Noel”, entiendo el significado de los reyes magos, es algo religioso, tiene su razón de ser, pero, ¿papá Noel? Supongo que es para duplicar los regalos de los niños, que como sobra la pasta…

Estoy harta de los prototipos que se han creado, ¿Por qué no me puedo sentir bien conmigo misma hasta que no pese -56789876543 kilos? No lo entiendo. Y ahora es cuando me diréis : “eso no es asi, la belleza está en el interior” JA JA JA perdonad que me ría, pero no, no os engañéis, las cosas no funcionan asi.
Me diréis que cuando habéis visto a una chica gordita con un short, no habéis dicho: “pero esta mujer no tiene espejos en casa?” Si, queridos mios, si, asi funcionamos, en esto nos han convertido.
Podemos seguir pensando “el físico no lo es todo” para tranquilizar nuestra conciencia, pero para estar con alguien tiene que gustarte físicamente, por lo menos es lo que me pasa a mi, no se a vosotros…
Me duele escribir esto así, pero es mi forma de ver las cosas, es lo que la gente me ha demostrado, que como eres, que piensas y que sientes importa una mierda si no tienes la talla 36. Está claro que este tema afecta a todo tipo de personas pero sobre todo a las chicas, puesto que los chicos son, sin duda, más crueles.
Ellos no necesitan una talla 36 ya que nosotras somos mucho más comprensivas y si que nos guiamos más por lo que hay detrás del físico.
Y que queréis que os digaes lamentable.

No pienso hablar de política, solamente voy a decir que si no sabes, no hables.


Me queda hablar de fútbol. A mí personalmente no me gusta, pero respeto a la gente a la que si le gusta. Solo digo que no creo que el fútbol sea tirar contenedores, pegar a otras personas, emborracharse e insultar. 


Está claro que esta solo es mi visión de lo que está pasando, espero que os haya gustado y una vez más, gracias por leerme.

Sandra 



domingo, 25 de noviembre de 2012

Welcome to you


Bienvenido a ese momento de felicidad que hace que no pierdas la sonrisa. Ese momento de verlo todo rosa, de ser capaz de comerte el mundo. No lo ignores, no lo dejes pasar. Porque cuando tu estás feliz, esa felicidad es contagiosa.
Bienvenido a ese momento de armonía, que hace que todo te resbale, que estés tranquilo ante situaciones de estrés. No te engañes, no te mientas, puedes controlarlo todo, solo tienes que creer.
Bienvenido a todas esas tardes en las que te sientes solo, esas tardes que se arreglan con una taza de chocolate caliente y una par de palabras bonitas. No te agobies, no eres el único, no estás solo, a todos nos pasa.
Bienvenido a ese momento de esperanza que hace que puedas con todo. No dejes que desaparezca, piensa que la esperanza es lo último que se pierde. No pidas perdón por creer en imposibles pues son los que dan sentido a todo esto.
Bienvenido a ese momento de bajón, de darlo todo por perdido, de rendirte. Sabes que quien no arriesga no gana y que todo tiene solución excepto la muerte.
Bienvenido a ti, a todo lo que llevas dentro, recuerda que eres lo primero y más importante. Ya sabes: “Cree en ti hermano, duda del resto”. 



 Sandra

jueves, 22 de noviembre de 2012

Love is live.


¿Nunca os habéis parado a pensar por qué es el amor algo que mueve el mundo? Yo creo que si lo hace, de una forma u otra. Amor a los amigos, a la familia, a una persona especial o incluso a algo únicamente platónico.

Siempre me he preguntado por qué somos tan dependientes de él, por supuesto, me incluyo.
¿Por que cuando no lo tenemos hacemos lo posible por buscarlo? No hablo únicamente de relaciones serias, simplemente de alguien en quien pensar, de alguien que llene ese vacío que queda en nuestra cama cuando nos acostamos.

Yo siempre lo he buscado, siempre he sido de relaciones serias, y os digo de corazón que he vivido las experiencias más bonitas que podría haber imaginado. Te invade esa sensación de felicidad todo el día, te tomas las cosas de otra manera, sonríes sin darte cuenta con cada palabra que te regala, te quedas embobada mirándole, te estremeces con cada una de sus caricias, te derrites con cada uno de sus besos y no puedes sacarlo de tu cabeza.

Pero no se puede hablar del sol sin mencionar a la luna y en el amor, no todo es de color de rosa. Las cosas no son eternas y menos en estos tiempos que corren, y puede doler mucho, puede hacerte perder las ganas de levantarte de la cama, de comer, de sonreír y sobre todo de volver a querer.

Y yo me pregunto, si sabemos que el amor puede doler tanto, ¿por que seguimos buscándolo a toda costa? ¿Qué tiene que no puede evitar que lo necesitemos?
Hablamos de marihuana, de tabaco, de cocaína pero al fin y al cabo… ¿No es el amor la peor de las drogas? 


   Sandra 


miércoles, 21 de noviembre de 2012

A través de mi retina.


Puesto que hace muy poco que he empezado con este blog, creo que es necesario que sepáis algo más de mi.
Siempre he sido una persona alegre, que se ilusiona por las pequeñas cosas, pero la vida me ha enseñado que “ni todo es tan blanco, ni todo es tan negro”. Soy una persona madura para mi edad, lo que hace que mis padres confíen plenamente en mi. Me encanta salir de fiesta, pero casi no bebo y nunca he fumado, no creo que sea imprescindible para pasarlo bien. Soy una persona desordenada, y mi madre piensa que es mi forma de rebelarme contra el mundo. Adoro la música y no podría vivir sin ella, no tengo un estilo concreto, más bien voy por rachas. Soy bastante payasa cuando cojo confianza. Por desgracia soy asmática y aunque digan que no, eso condiciona mi vida. Siempre he sido una persona con miles de millones de complejos, pero poco a poco he ido superándolos, porque me he dado cuenta de que no hacían más que amargarme la existencia. Odio a muerte la impuntualidad y me siento fatal cuando llego tarde. Soy muy blanquita de piel y por eso siempre me quemo con el sol. Hace unos años decidí que quería dedicar mi vida a la psicología y aunque me ha costado sudor y lágrimas, aquí tenéis a una futura psicóloga.Soy una persona muy sociable y me encanta hacer amigos. Tengo la manía de dormirme a las tantas de la mañana porque nunca tengo sueño. Soy caprichosa cuando las cosas no salen como yo quiero, pero siempre doy el brazo a torcer. Tengo mucha empatía y eso hace que siempre esté pendiente de los demás. A veces soy borde pero suelo darme cuenta y rectificar. Siempre he sido una enamorada del amor y aunque esto me ha hecho pasarlo mal, no he dejado de creer y gracias a ello tengo un novio que no me merezco.

Soy fan de las noches en el sofá, con mantita, palomitas, peli y buena compañía. Me encanta mirar por la ventana y perderme en mis cavilaciones.Odio el olor a hierba recién cortada. Me encanta tener charlas con mi madre porque es la persona que más me conoce. Odio el vacío que siento al despedirme de una persona o terminar de leer un libro. Me encanta despertarme y estar tumbada en la cama hasta que el cuerpo me pida levantarme. Odio contarle algo importante a alguien y que esa persona no me cuente nada suyo porque me siento desnuda. Me encanta el café. Odio el té. Me encanta la fotografía es una de mis grandes pasiones Odio que las personas no sean agradecidas. Me encanta bañarme en el mar hasta salir arrugada y muerta de frío. Odio a la gente que solo quiere aparentar. Me encantan las puestas de sol. Odio ver a mi hermano llorar, me parte el alma. Me encantan los lazos y los gorros, son mis pequeños tesoros. Odio el sentimiento de frustración cuando ves que pierdes a alguien y no puedes hacer nada al respecto. Me encanta el color negro para vestir porque combina con todo. Odio a muerte madrugar. Me encanta la navidad porque mi mami pone la casa preciosa. Odio desmaquillarme. Me encantan los peques, son mi debilidad. Odio la prepotencia. Me encanta que haga sol, pero no un calor insoportable. Odio a los listillos que se creen que lo saben todo. Me encanta la lluvia pero sólo si estoy dentro de casa. Odio la rutina. Me encanta echarme colonia siempre que salgo de casa e ir oliendo a mora. Odio tener que esperar el bus, puesto que soy impaciente. Me encantan los abrazos que transmiten todo lo que siente una persona. Odio las conversaciones frías después de haber sido grandes amigos. Me encanta celebrar mi cumpleaños pero por X o por Y llevo 3 años sin hacerlo. Odio a las personas que se han liado con otras y lo cuentan como quien gana un trofeo. Me encanta viajar pero no puedo hacerlo tanto como me gustaría. Odio la sensación de querer algo pero no saber lo que es. Me encantan los dulces, y si, son un peligro. Odio que la gente se meta en cosas que no le incumben. Me encanta jugar con hermano porque es la cosa más cuqui del mundo. Odio perder los papeles cuando algo me sienta mal.

Y me encanta escribir y por eso os he soltado todo este rollo. Espero que os haya gustado y os haya servido para conocerme un poquito mas.
Muchas gracias a todos por leerme.














Sandr

lunes, 19 de noviembre de 2012

Valora lo que tienes.


Tantas y tantas veces he contenido todo lo que llevaba dentro , tantas y tantas veces he puesto el modo “sonrisa automática” para evitar que nadie notara que en realidad por dentro estoy hecha mierda, que a veces olvido como exteriorizar eso que siento.

Pienso que es muy fácil encerrarte en tu habitación, poner la música a todo volumen  y llorar hasta quedarte sin lágrimas. Lo difícil es pedir ayuda, porque cuando lo haces te sientes débil y frágil y  a nadie le gusta eso. Por eso buscamos a personas en las que confiamos de verdad, personas que no nos van a juzgar por sentir lo que sentimos o pensar lo que pensamos.

Estoy cansada de personas que prometen el cielo y ni siquiera pueden alcanzarte una estrella, de personas que te halagan a la cara y a la espalda te ponen de puta para arriba, de personas en las que empiezas a confiar y que al final son como las demás, de personas que dicen que te echan de menos pero después no tienen ni un segundo para ti, de personas que no te conocen de nada y juzgan como les da la gana, de personas que no comparten tu opinión y que tampoco la respetan, de personas  que se creen superiores y te hacen sentir como la última mierda, de personas que mienten y manipulan para conseguir sus objetivos.

Estoy tan cansada de todo eso, que ya me cuesta confiar, me cuesta pensar que una persona sea buena y haga cosas por ti sin esperar nada a cambio. Y me da pena, porque sé que estoy siendo injusta con personas que de verdad merecen la pena, pero aunque queramos cambiar nuestra actitud nuestro pasado no desaparece.


No sé en tu vida, pero en la mía no abundan esas personas con las que poder contar. Y por ello tengo que agradecerles haberse ganado mi confianza, y no haber jugado con ella, gracias por estar ahí.





  
Sandra

domingo, 18 de noviembre de 2012

He hablado en mi anterior entrada sobre empezar nuevas etapas  de la vida. 
Pienso que la vida es un ciclo, y que todo, tarde o temprano vuelve, pero... ¿Como saber cuando empieza una etapa y cuando termina otra? 
A veces cuando hemos aguantado demasiadas cosas, cuando mucha gente nos ha fallado, cuando todo ha ido mal, no existe un hecho o un momento que haga que esa etapa cambien. Realmente es nuestra actitud la que debe cambiar, es el tomarnos las cosas de una manera diferente. 
La verdad es que la felicidad está infravalorada, cada vez más, necesitamos grandes hechos o grandes cosas para conseguir una sonrisa en nuestro rostro. Pero esto no es así, cualquier detalle, por pequeño que sea, puede ilusionarnos de la misma manera.
Como bien he dicho, es una cuestión de actitud de cada persona. 
Así que haz cambios en tu vida, intenta fijarte en cosas mínimas que hacen que la vida sea eso, vida.




                        Sandra 


sábado, 17 de noviembre de 2012

The beginning

Todo en esta vida tiene un principio, quizá no tenga un final predeterminado pero si un principio. 
Yo he decidido empezar este blog para empezar una nueva etapa en mi vida.
Reconozco que abandoné mi anterior blog por falta de tiempo, de ganas, o simplemente de autoestima por no ver el resultado que siempre me habría gustado. Reconozco también que comienzo este con ganas e ilusión gracias a personas que me han apoyado y me han recomendado que siga escribiendo. 
Sinceramente no se para quien va dirigido todo esto, pero espero de corazón que guste a quien tenga tiempo, paciencia y ganas de leerme. 
No tengo mucho más que decir, a partir de ahora subiré entradas con mis pequeñas reflexiones.
Con cariño:
          
   Sandra